Por la mañana salió corriendo a la tienda y escuchó detrás de la puerta del vecino ¿a crujir. Acercó lentamente, y llamó, y yo inmediatamente voló áspera respuesta:
— Llama! Llama al número de la llamada, he dicho!
Se ha ofendido, y siguió su camino hasta la tienda. Regresó a los 15 minutos y oyó todo lo mismo y el crujir de los rascado:
— Hola, vecino, tienes ahí todo está bien?
— Te pido, simplemente llama a la llamada! — oyó una voz lastimosa.
Llamé y enseguida se escuchó el grito de mujer. Como se ha aclarado, cansado vecino después del turno de noche abrió la primera puerta y accidentalmente su cerró de golpe tras de sí. En consecuencia, cayó en la trampa entre la primera y segunda vez. El apartamento tiene dos dormitorios, y la mujer dormía en el otro extremo de la habitación.