"Yo soy grande, es pequeño: ¿por qué no hay que ofenderse con el niño

"Te amo"hace un Par de meses nos con el niño tenía que reunirse y mudarse. De un alquiler a otro. Al mismo tiempo que yo superaba aún más importantes, buscando un apartamento en la planificación de la mudanza, reparación, trabajo y pedidos adicionales.

El niño casi todo el tiempo pasó a la abuela. En aquellos días, cuando él se quedaba conmigo, sólo vio la ansiedad, la fatiga y la ira. Yo no podía con él, jugar e inventar cuentos. Me costó un gran esfuerzo de hablar y responder a las preguntas. En la cabeza le daba vueltas constantemente anuncios de alquiler, una tarea prioritaria de trabajo, la limpieza, la reparación, el pago de facturas.

 

Qué es entonces un montón de adultos de causas que llevaron a mí el de mi hijo.





 

Mi hijo ha visto imprevisible mamá, que puede desprenderse de desconocido para él la razón. Mi chico estaba asustado. Él quería llegar a mí, pero no sabía cómo. Y una mañana, cuando me prohibió a desayunar helado, él dijo: "Tú no me quieres".

Luego él dijo, "no me quieres", cuando se ha golpeado con el pie sobre la puerta. Luego él dijo esto, cuando descendió la lluvia, mientras que el senderismo. Luego cuando él no pudo cegar el pollo. Luego cuando yo no había leído el tercer cuento de hadas consecutivos. Luego cuando él tuvo una pelea con otro.

Se empezaba a hablar de esto cada día. Cuando duele, cuando era aburrido, cuando creo que no ha permitido, cuando íbamos demasiado tiempo, cuando íbamos demasiado rápido, cuando él no podía reunir el lego, cuando no estoy de inmediato respondió a su pregunta. A todos mi hijo diciendo sólo uno: "Tú no me quieres". Yo era измотана, yo estaba muy molesto. Ya que lo quiero, más que nada en el mundo.

Yo estoy haciendo todo por nosotros, ¿por qué tengo que justificarme?

Yo сердилась – "¡no es repetir", "cuánto", "no soy culpable", "estoy harto". Que, la manipula? Me окатывало con el calor de la culpa y la vergüenza ante su hijo, que ha dejado de confiar en mí, y de esto se hacía peor. Después de una semana me di cuenta de mi niño no dejará, como por arte de magia, repetir estas palabras.Es hora de volver a convertirse en adulta, hasta que yo no perdí.

Hablé con una amiga y leí varios guardados de artículos sobre el apego y el amor incondicional. Pensé que podría me consuelo, si yo era niño / a? No más excusas, no razones razonables y más silencio.

Yo simplemente quería en de la manija. Para conmigo han estado en silencio, погладили por el pelo y nunca se tomaron el tiempo a dejar ir.

Por lo tanto, me he tomado un hijo de la pluma y comenzó a acariciar la cabeza. Y dijo: "Yo te amo, como hasta la luna ida y vuelta. Yo te amo, a pesar de ni en que. Te amo mucho y nunca dejaré". Me dijo: "lo siento, que te daba miedo y el mal. Ahora estoy cerca".

Fue difícil para mí, pero mi hijo estaba en el este no tiene la culpa.

Me era necesario el silencio, pero él no tenía que sentarse en silencio en su habitación. Él tres años y medio. Todo lo que le es importante escuchar, es que yo lo amo, a pesar de la ansiedad, de la larga ausencia y la fatiga.

"Te amo".

Dije antes y lo digo de nuevo tantas veces como desee escuchar, para que la ansiedad se ha ido. Tomaba y tomo en sus brazos de nuevo – y tengo tanto tiempo para él mismo quiso bajar y seguir corriendo por sus importantes asuntos. Y aun cuando él está dispuesto a correr, he прижимаю a él en unos segundos más.





 

Yo ya no me disculpo. Yo no cuento con él acerca de cómo me siento mal y ansioso misma. ¿Cuál es la diferencia.

Soy un adulto. Él es pequeño. Mi objetivo es transmitir a ello el amor incondicional.

Su tarea – gracias a estar tranquilo y a desarrollarse desde este punto de reposo.

— Tú no me amas!

— Yo te amo, mi buen.

— No, me has обманываешь.

— Digo la verdad. Yo te amo!

— Pero eres muy pronto me dejes de amar...

— Yo voy a amar siempre, y mi amor por ti nunca acabará.

Voy a amar siempre a su hijo, y mi amor por él nunca acabará. Y si él quiere oír otra vez – okey, voy a decir esto.

Yo adulto. Me es fácil. publicado

 

Autor: María Rozkova

P. S. Y recuerde, sólo cambiando su conciencia — estamos juntos cambiando el mundo! ©

Fuente: //ezhikezhik.ru/reviews/a-bol-saa-on-malen-kij-pocemu-ne-nado-obizat-sa-na-rebenka