La gente - вахтеры

Estamos en contacto diario con el por el descaro y aun no la notamos queHay personas que todos ustedes saben. Aquí usted puede incluso pensar que no tenía tiempo, y ya han caído en la categoría de sospechosos de los ciudadanos. Ellos leen sus pensamientos, sospechan de sus hijos y odian a los perros. Están por todas partes. En el metro, en las tiendas, en las calles. Esta es la gente — вахтеры.

Son ellos los que le gritan en la huella: "donde presh de намытому" y levantan mojado, sucio trapo. Son ellos los que te llevan hasta las lágrimas en las colas. A diferencia de los abuelos en el banco, que en el curso de su vida familiar, la gente — вахтеры investidos de autoridad. Se puede pedir ver su bolsa, aunque esto está prohibido por la ley. Estudiar su pasaporte. Asustar a sus hijos. Absolutamente no es importante, ¿qué puesto ocupan, los une una sola cosa – que le desprecian.





Cuando estoy en la primera vez que se encontraba en el extranjero, iba a las tiendas, habiendo arrastrado la cabeza en los hombros. Eran los años noventa, y yo, una vez en el supermercado, absolutamente no sabía qué hacer, cómo pagar, si todo se puede tomar. Ahora es ridículo, entonces, era muy dramático. Me presento ante los estantes, los veo, me va enorme hombre en forma, yo casi pierdo la conciencia del horror. Él se acercó, tomó mi mano la cesta y me ha pasado en toda la tienda, para ayudar con las compras, pasaba a la caja, deseó un feliz día. Su colega en la salida pidió cheque, dibujado en él de conejo y escribió "bienvenido a nuestra tienda". Honestamente, estas personas han hecho para mí no menos que todos mis terapeutas juntos. Se ha demostrado que en cualquier lugar que tú tienes derecho a que se respete.

La semana pasada me compré el libro en una conocida tienda de internet. La entrega por el correo. Un poco de lo que él llega tarde a su hora, y debido a esto, todos mis planes se han violado. Un poco de lo que no tenía de la entrega (cantidad no es importante, me gustaría y así ella le dejó, pero yo no quiero, cuando alguien controle mi dinero, además de mí). No sólo me expresaron que estoy incómodo vivo (en el centro de san petersburgo) y alto (segundo piso) y podría ella misma salir a la calle.

Y lo más importante — el libro de olieron cigarrillos. Para mí, la lectura de libros es un ritual, cuando me siento en el sillón, luego vierto el mismo té y leo.De lo contrario, ¿por qué comprar el libro en papel? Se puede comprar la hoja de siete veces más barato. Llamé al administrador de los servicios de entrega y se quejó. A las ocho de la mañana en la puerta llamó a un mensajero, tiró de mis ciento veinte rublos, y dijo que, como yo, sufren de la gente normal. Aunque no fue un asunto de dinero, sino en el olor de los cigarrillos, que como a ti. Y es, también, el respeto. El respeto a las personas que disfrutan de tus servicios.
 



 

Estamos en contacto diario con el por el descaro. Que ya ni siquiera lo noto. Tratamos de justificar el descaro las mujeres de la limpieza, de la misma manera no pagan mucho. Mensajeros — y ellos se cansan de todo el día en las piernas. Los guardias, bueno con ellos a tomar, cualquier persona normal va en este tipo de trabajo. Nos olvidamos de lo más importante — ellos mismos lo han decidido. Ellos mismos han elegido. No veo ninguna diferencia entre una persona que puro limpia el suelo y el hombre, que, por ejemplo, atiende a mí en el banco. Esto es respetada trabajo.

Aprender a respetarse a sí mismo y respetar a los demás. Aprender a respetar el trabajo ajeno. Hace muchos años asistí a la práctica en una organización que ayudaba a las mujeres que se encuentran en la difícil situación de la vida. Esto se asustados, la gente humilde, que de repente, puede ser el primero en la vida, se encontraban en сносных humanas condiciones. Y aquí se han demostrado en todo su esplendor. Se burlaban de aparcacoches, las ceremonias a los médicos y los psicólogos, скандалили por el color de la ropa de cama, iban a quejarse jefe mdico de la falta de la dulzura de la compota durante el almuerzo.

Usted entiende, simplemente se ha dejado ir. Dejaron de ser dependientes y los humillados y el instante exigieron una indemnización por su reconstrucción de la autoestima. Se encontraban al otro lado de la barricada. En su entendimiento, tal vez, ser o un esclavo o un amo.Pero no en un hombre libre. Cualquier buen gesto se estimaban como una debilidad. Y requería mucho tiempo y esfuerzo para ayudarles a aprender a vivir, no унижаясь y no rebajando.

Puede surgir la pregunta de cómo luchar, y si vale la pena en absoluto hacerlo. Hay una gitana adagio de que "no se puede cubrir con su falda de todo el mundo". Yo игнорирую, si es posible y paro por sus derechos, si son violados mis intereses. Pero me resulta más fácil pasar de largo, de entrar en la lucha con el hecho de que no se puede ganar. No puedo con su falda de cubrir todo el mundo. publicado

 

Autor: Elena Pasternak

P. S. Y recuerde, sólo cambiando su conciencia — estamos juntos cambiando el mundo! ©

 

 

Fuente: //vk.com/elenapasternak?w=wall1128374_5241