Dos istoriyki

Amigo se encuentra en las cercanías de Moscú y votantes, stopaet coche extranjero con una persona de la conducción nacionalidad caucásica. Están viniendo. El ayuno. Policía detiene. Conduje a cabo. Lo mucho tiempo hablando con el representante de la ley. Toma el certificado de registro de derechos y una nube de Dios no conoce papeles. Después de unos 10-15 minutos de conversación termina con prosaica - condujo extraído de bolsos monedero ...
 Flops persona detrás del volante y conduce bruscamente a Moscú. Cuarenta metros da un monólogo:
 - Maldita sea. Kretyn. Lymyta. El pasaporte no es mi imagen. En nombre de los derechos de otra persona. El poder expiró. La máquina en el secuestro. Pero él se pegó - hay un registro de pasajeros o no. Kretyn.

Él le dijo a un amigo cazador. Su padrino, el mismo cazador ávido como él, hace cuatro años con la familia compró una licencia para ciervos. ¿Cómo son cazados - no es el punto. La carne fue compartida de manera justa y padrino de regresar en el negocio, y los cuernos. Bueno son los cuernos, el ciervo tenía once años de edad. Entonces llevó los cuernos en forma adecuada, no sé qué se está haciendo para ellos puede revelar el barniz - no importa. Se metió los cuernos en un tablero y la colgó en el lugar más visible.
 Vino a él una (también cazador natural) y vio los cuernos, declara con orgullo:
 - Y yo, Juan, los cuernos son algo más.
 Qué padrino, no una pérdida, responde:
 - Así que usted Bueno, Vania, mi esposa más joven.