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¿Qué pasa con nuestros cerebros cuando aprendemos cosas nuevas?
Introducción. El proceso de aprendizaje no es sólo una asimilación externa de la información, sino también una profunda reestructuración que ocurre en el cerebro de cada persona. En el mundo actual, donde la vida y la tecnología están cambiando rápidamente, la capacidad de aprender llega a la vanguardia y se convierte en un factor crítico en el éxito en varios campos. Sin embargo, pocas personas piensan que al aprender un nuevo idioma, tocar un instrumento musical o habilidad técnica, no sólo adquirimos habilidades valiosas, sino que también literalmente fortalecemos la estructura de nuestro cerebro. En los círculos científicos, esta capacidad de reconstruir se ha llamado “neuroplasticidad”, y es esta habilidad la que sustenta el desarrollo de nuestro potencial intelectual, creativo y social. En este artículo, miramos cómo el cerebro forma nuevas conexiones neuronales, por qué el aprendizaje regular ayuda a mantener la mente en buena forma, y cómo estos descubrimientos hacen que nuestro enfoque a la vida sea más flexible y rico.
Neuroplicidad: La clave para el desarrollo continuo
El término “neuroplasticidad” (de la neurona griega – “nerve” y plastikos – “capaz de formar”) denota la propiedad del sistema nervioso para cambiar bajo la influencia de la experiencia. Anteriormente, los científicos creían que la plasticidad era posible sólo en niños cuyos cerebros aún no habían alcanzado el pleno desarrollo. Sin embargo, la investigación moderna, incluyendo Nature y NCBI, muestra que el cerebro de las personas de todas las edades conserva la capacidad de reconstruir. Dominar nuevas habilidades, idiomas y pasatiempos puede aumentar la actividad de ciertas áreas del cerebro, formar conexiones neuronales adicionales y literalmente empujarnos a un nivel superior de habilidades cognitivas.
Cómo se forman nuevas conexiones en el cerebro
Nuestros cerebros están compuestos por miles de millones de neuronas conectadas por sinapsis – puentes que llevan señales eléctricas y químicas. Cuando encontramos nueva información o tratamos de realizar una acción inusual, se activan circuitos de neuronas que anteriormente se utilizaban menos a menudo o no. Cuanto más a menudo repetimos una acción, más fuertes serán las nuevas conexiones: aumentan y fortalecen las sinapsis, y la información comienza a ser transmitida más eficientemente.
1. El papel de la repetición
La repetición es la base para dominar habilidades complejas. Si usted aprende un nuevo idioma, entonces la práctica regular (leer, hablar, hacer ejercicio) activa repetidamente las mismas vías neuronales. Como resultado, las sinapsis entre las células nerviosas individuales se vuelven más fuertes, la velocidad de transmisión de la señal aumenta, y la habilidad misma es automatizada y transferida a la memoria a largo plazo.
2. Errores como motor de aprendizaje
Los errores de aprendizaje son más que un obstáculo o “failure”. Fisiológicamente, inician un proceso de reevaluación y ajuste del comportamiento. Cuando se enfrenta a un error, el cerebro vuelve a pintar la ruta, tratando de encontrar conexiones neuronales óptimas. Es por eso que los fracasos son una parte importante del aprendizaje, y su análisis constructivo le permite formar un sistema más flexible de conocimientos y habilidades.
3. Recompensa por las acciones correctas
Cuando logras el éxito, incluso pequeños (por ejemplo, cuando adivinas la respuesta correcta en una prueba o aprendes a pasar suavemente de un acorde a otro en una guitarra), el cerebro produce hormonas de placer, incluyendo la dopamina. Este proceso “reverso” sirve como señal de que el circuito neuronal formado es útil y necesita tomar posesión. Así, una respuesta emocional positiva aumenta la motivación para continuar practicando.
Aprender a mantener tu mente tonificada
Con la edad, nuestro sistema nervioso sufre cambios naturales: los procesos cognitivos disminuyen, la velocidad del procesamiento de la información se deteriora. Sin embargo, numerosos estudios muestran que el aprendizaje activo, especialmente asociado con desafíos intelectuales y creativos, puede frenar estos procesos e incluso compensar algunos cambios relacionados con la edad.
- Entrenamiento de memoria: Al aprender nuevas palabras o hechos, el hipocampo, la región del cerebro responsable de la formación y preservación de los recuerdos, se mejora.
- Desarrollar un pensamiento flexible: La solución de problemas no estándar forma formas alternativas de procesamiento de información, lo que aumenta la capacidad de responder rápidamente a los cambios ambientales.
- Actividad social: La co-educación (cursos, círculos, grupos en línea) contribuye a la formación de nuevos contactos sociales y reduce la probabilidad de aislamiento cognitivo.
Cómo mejorar la eficacia del aprendizaje
A pesar de que el cerebro humano tiene una asombrosa plasticidad, existen técnicas que ayudan a acelerar y simplificar el proceso de desarrollar nuevas habilidades. He aquí algunas recomendaciones basadas en la investigación científica:
1. Diversidad de enfoques
Trate de no limitarse a una técnica: combinar lectura, escucha, escritura y práctica con un maestro o mentor. Múltiples canales sensoriales implican áreas adicionales del cerebro, aumentando el nivel general de comprensión.
2. Ritmo y descanso
El “clogging” constante sin interrupciones puede conducir a sobrecarga y baja eficiencia. Períodos alternativos de trabajo activo con descanso y sueños a corto plazo. Durante el sueño, el conocimiento fresco se consolida y se fortalecen las sinapsis formadas.
3. Comprobando emociones
Un rico contexto emocional (interés, curiosidad sincera, agradable sorpresa) ayuda al cerebro a "recordar" mejor la situación. Cuando el aprendizaje genera sentimientos positivos, la dopamina y otros neurotransmisores involucran centros de motivación más activamente, mejorando la fijación a largo plazo de nuevas conexiones.
4. Establecer metas claras
Establezca una tarea específica para usted: “Aprenda 20 nuevas palabras a la semana” o “Aprenda a jugar una melodía simple en un instrumento en un mes”. Esta fijación de objetivos ayuda al cerebro a centrarse en un objetivo específico, asignando recursos de manera más eficiente.
Oportunidades ilimitadas para el desarrollo
A medida que aprendemos algo nuevo, nuestros cerebros están "refrescando" con redes neuronales cada vez más complejas. Es esta cualidad que nos da el potencial de crecimiento personal y redescubrimiento en una nueva era u otra esfera profesional. La neuroplicidad le permite mantener una perspectiva amplia, sensibilidad a los cambios y alta adaptación a las nuevas condiciones.
Conclusión
La capacidad de aprender no se limita a la niñez o a la juventud temprana – es una propiedad innata de nuestro cerebro que nos acompaña todas nuestras vidas. La neuroplasticidad ayuda al cerebro a formar nuevas y fortalecer las conexiones existentes, y los errores y los éxitos estimulan alternativamente su reestructuración en la dirección correcta. La práctica regular en el aprendizaje, ya sea aprendiendo idiomas extranjeros, dominando las tecnologías informáticas o la creatividad, le permite mantener su mente en tono a cualquier edad. Este desarrollo sistemático no sólo protege contra la decadencia mental relacionada con la edad, sino que también da una sensación de auto-realización, motivación y satisfacción de la vida.
En última instancia, entender la naturaleza de la neuroplicidad forma una relación más profunda con cómo dominamos cualquier habilidad. Cuando reconocemos el potencial de nuestros propios cerebros, ganamos la clave para el crecimiento y desarrollo personales continuos, y abremos el camino a una vida rica, agitada y descubierta.
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