Los indicadores que con este hombre puede construir una familia fuerte y feliz:


• su relación comenzó con la amistad y la comunicación, físicamente no están muy atraídos el uno al otro (la pasión salvaje y el deseo sexual - un fuerte indicador de las relaciones kármicas, si el paso en una relación, cuya salida será en el dolor y el sufrimiento);

• experimenta una sensación de calidez emocional al lado de este hombre, el afecto y el amor incondicional. Cuanto más se abre el uno al otro, la sensación de intimidad espiritual se convierte en cosas más profundas y secretas;
• usted muy interesante juntos, usted tiene una visión similar del mundo, los objetivos comunes y valores, y la misma idea, para el cual se creó la familia (este es el principal indicador - busque el que va al mismo lugar y usted);
• No tiene ilusiones acerca de este hombre, que mirarla sin lentes color de rosa, al ver las luces y sombras, pero teniendo ambos lados, no tratar de cambiar a la otra, y le da el derecho a ser él mismo (por lo tanto lo hace bien hacia usted, apreciamos su singularidad, sin tratar de arreglar cualquier cosa);
• que se complementan entre sí. A pesar del hecho de que su calidad es en gran medida, los principios y las perspectivas de la vida son similares, sin embargo, que tendrán diferencias. La segunda persona será fuerte en aquellas materias en las que son débiles, y viceversa. En algunos pares, por desgracia, puede convertirse en un pretexto para el conflicto, pero si usted encuentra un terreno común, que cuenta con una puede complementarse entre sí, aumentando significativamente los límites del mundo entre sí;
• Se corresponde con la imagen del alma a su compañero, que disponga de las cualidades que son realmente importantes para usted. O, tiene el potencial de descubrir estas cualidades, que se muestran en el proceso de su comunicación;
• Y por último, figura delgada. Su charla puede durar muchos años, tiempo durante el cual se puede dispersar y separados de forma permanente, pero siempre hay algo que le conecta sin dejar que rasgar el hilo invisible que conecta su alma. Al igual, la misma que sostiene constantemente que conduce, a pesar de los obstáculos y las circunstancias