El gran problema: ¿Por qué la felicidad no puede alcanzarse




Imagina que has logrado todo lo que has soñado. La cuenta bancaria está llena, la carrera está en su pico, la relación es perfecta. Y de repente, vacío. ¿Conocido? Bienvenidos a la mayor paradoja de la existencia humana. Pasamos nuestras vidas persiguiendo felicidad como un gato después de su cola, y el resultado es el mismo.
¿Por qué está pasando esto? Tal vez el problema no es que hagamos algo malo, sino la misma naturaleza de la felicidad. El gran filósofo alemán Immanuel Kant lo pensó. Y sus hallazgos pueden cambiar dramáticamente su visión de la vida.


La trampa del infinito "más"
Para todos, la felicidad es algo especial: riqueza, belleza, poder, multitudes de fans o una familia amorosa. Pero hay una cosa que todas estas actividades tienen en común: nunca terminan. Una persona puede ser aún más rica, aún más popular, incluso más influyente. Cuando se le preguntó, “¿Quién es la persona más dulce del mundo?” un espejo mágico siempre apuntará a alguien más.
La perfección no conoce límites, pero eso es en lo que nos centramos. Nadie quiere un segundo lugar o un ingreso promedio. Siempre quiero más. Así que la felicidad se escapa de nuestras manos como agua a través de nuestros dedos.

Esto no es una abstracción filosófica, sino una realidad cruel. Mira las estrellas del negocio del espectáculo, billonarios, políticos – muchos de ellos sufren de depresión, adicción, soledad. ¿Paradoja? No, el patrón.
¿Por qué nuestros cerebros están trabajando contra nosotros?
Evolutivamente, estamos programados para luchar constantemente por la mejora. Nuestros antepasados, que estaban contentos con poco, no sobrevivieron. Los sobrevivientes eran aquellos que siempre querían más comida, mejor refugio, hijos más fuertes. Este mecanismo ha sobrevivido, pero en el mundo moderno funciona contra nosotros.

Kant y Matemáticas de los Imposibles
Immanuel Kant, estudiando la naturaleza de la felicidad, llegó a una conclusión revolucionaria: el concepto mismo de la felicidad es incierto. Todos queremos hacerlo, pero ni siquiera sabemos cómo hacerlo teóricamente. ¿Por qué?
Dale a un hombre todo lo que quiera, y al mismo tiempo sentirá que no es todo.

Todos los elementos de la felicidad convencional —dinero, salud, relaciones, éxito— son empíricos, es decir, mensurables. Y siempre pueden ser mejores. Kant concluye que una persona no puede lograr un resultado final porque el proceso es interminable.
Efectos secundarios de la búsqueda de la felicidad
Además, la búsqueda de ciertos elementos de felicidad suele llevar al resultado opuesto:
Salud: La fijación excesiva en la salud conduce a la ansiedad. La atención se centra en las señales más pequeñas del cuerpo, los problemas se inventan fuera del aire delgado. El resultado es estrés constante, viajes interminables a los médicos, gastos financieros.

Dinero: La acumulación de capital hace necesario renunciar a muchas alegrías. Cuando hay dinero, hay un nuevo problema – no perderlo. Siempre pienso en la necesidad de seguir adelante, porque los competidores no duermen.

Detrás de cada pico conquistado hay otro, aún más empinado y más peligroso. Es como un juego donde las reglas cambian después de cada nivel y el jefe final es una ilusión.
El concepto de bienestar absoluto
La felicidad no puede ser parcial por definición. Representa el bienestar absoluto en el presente y el futuro. Ser feliz significa nunca sentir insatisfacción, nunca sentir el sabor del sufrimiento. Pero tal escenario es irreal.
Deja de pensar en la felicidad como un estado permanente. Piénsalo como una serie de cosas que puedes ver y apreciar. La felicidad no es un destino, sino una forma de viajar.

En la vida de cualquier persona – los más ricos, más populares, más inteligentes, más hermosos – hay días malos llenos de dolor, pérdida y dolor. No es un bicho, es una característica de la existencia humana.

Sendero Alternativa: De Resultados al Proceso
Kant sugirió tomar cosas que supuestamente acercan la felicidad como consejos en lugar de instrucciones obligatorias. Cada paso en esta dirección puede traer alegría, pero hay que tomar decisiones importantes basadas en la lógica y en una perspectiva a largo plazo.
La impulsividad o la búsqueda emocional de la felicidad a menudo estropea la vida y pone fin a los sueños más grandes. La paradoja es que cuanto menos perseguimos la felicidad, más a menudo aparece.

Recomendaciones prácticas
En lugar de una búsqueda interminable de un ideal inalcanzable, pruebe los siguientes enfoques:
1. Kant vio el camino hacia la verdadera satisfacción mediante acciones morales. En esta zona, el ideal es alcanzable y el camino es claro. Siempre sabes cuando lo hiciste bien o mal.

2. La felicidad a menudo aparece como una parte discreta del escenario general de la vida cuando no se mira. Aprende a notar los buenos momentos en tiempo real, no sólo en retrospectiva.

3. Decide por ti mismo cuánto dinero, reconocimiento, éxito realmente necesitas para una vida cómoda. Cualquier cosa más allá de eso es un bono, no una necesidad.

4. La investigación muestra que la calidad de la relación es el único factor que correlaciona constantemente con el bienestar subjetivo. Lo que importa no es el número de amigos, sino la profundidad de la conexión.

Felicidad metafísica
Kant no negó completamente la posibilidad de felicidad. Sugirió pensar en la felicidad metafísica: la creencia de que el bienestar es proporcional al número de cosas que haces bien. Esto no es necesariamente una creencia religiosa, sino una esperanza para la justicia del universo.
El hombre necesita una brújula moral, una esperanza para un futuro donde el bien es recompensado. De lo contrario, surge la pregunta: ¿por qué necesitamos moralidad, normas sociales, principios éticos?

Esto no es optimismo ingenuo, sino sabiduría práctica. Las personas que viven con sus principios experimentan menos conflicto interno y más satisfacción en la vida.
Donde encontrar la felicidad
La respuesta paradójica es: todos los días. Pero no en el sentido de “regocíjate en las pequeñas cosas”, sino en el sentido de “parar la vida para después”. La felicidad está oculta de un cazador determinado, pero a menudo sucede por accidente cuando estamos ocupados haciendo algo importante.
De alguna manera incomprensible, la felicidad se esconde del cazador determinado, pero a menudo aparece como una parte inconmensurable del paisaje general de la vida cuando no se mira.

¿Cuántas veces te has dado cuenta de que eras feliz, pero en retrospectiva? No es una coincidencia, es un patrón. La felicidad es un efecto secundario de una vida significativa, no su objetivo.
Conclusión: Aceptar la Paradoja
Tal vez es que la felicidad es inalcanzable, y su valor principal miente. Si pudiéramos alcanzar la felicidad absoluta y parar allí, la vida no tendría sentido. Conducir lo mejor es lo que nos hace humanos.
Kant tenía razón: la felicidad como el objetivo final es una ilusión. Pero eso no es causa de desesperación. Es una liberación de obligaciones imposibles a uno mismo y una invitación a una vida más significativa.
Deja de perseguir la felicidad. Vive de tal manera que te encuentre. Haz las cosas correctas, cuida de los seres queridos, desarrolla, crea algo de valor. La felicidad vendrá como una consecuencia natural, no como una recompensa por el esfuerzo.

Glosario
Empírico - basado en la experiencia, mensurable, observable y cuantificable.

La felicidad metafísica es el concepto de la felicidad de Kant basado en la fe en la justicia del universo y la proporcionalidad de las buenas obras y el bienestar.

El sistema de valor utilitario es un concepto filosófico según el cual la corrección de las acciones se determina por su utilidad y eficacia.

El imperativo categórico es el concepto central de la ética de Kant, el principio de que uno debe actuar sólo de acuerdo con una máxima que puede convertirse en una ley universal.

El bienestar subjetivo es una evaluación individual de la calidad de su propia vida, incluyendo componentes emocionales y cognitivos.