Si alguien ofende a ti, tú tienes que elegir...

Como el Maestro con el Alumno iban por un sendero camino. Ven al encuentro se les va la persona, todo el взбудораженный, casi no llora.

— ¿Que ha pasado, amigo mío? — pregunta el Maestro.

Sí, me acaba de algún canalla ofendido en sus últimas palabras y, y, зазря! Que yo le de ese hecho?





— Él no podía ti ofender, — respondió el Maestro.

— Como no podía, si ha ofendido! — preguntó un transeúnte. — Tú ni siquiera lo sabes, sí, y me ves por primera vez. Como puedes afirmar tal?

El maestro se alejó unos pasos, miran en la tierra, luego se agachó, levantó algo y se acercó al hombre, dándole la encontrada mantiene pulsado el puño:

— Toma, esto te ayudará.

El maquinalmente tomó la propuesta, pero al ver que este escarabajo, se asustó y tiró un insecto.

— ¿Qué significa eso? — indignado transeúnte.

— Lo siento, amigo, yo no te quería asustar. Pero he aquí mi Estudiante es exactamente lo que necesitas.

Y, dirigiéndose a su Discípulo, le dijo:

— Dame ese digno señor lo que hemos encontrado, cuando descansaba en el jardín.

— ¿Qué es esto? — ha puesto en guardia transeúnte. — Si el comprador, no voy a tomar!

El alumno ha desatado la mochila y sacó una manzana. Un transeúnte озадаченно miró hermoso y jugoso fruto y, asegurándose de que ningún truco no, dio las gracias, pero aún no se ha convertido.

— ¿Por qué no lo tomas? — preguntó el Maestro. — Y el escarabajo tomó!

— El escarabajo tomé involuntariamente. Yo no sabía que tú me das! Y la manzana no me necesita.

— Aquí y en la vida: a menudo aceptamos lo que no necesitamos e incluso desagradable, simplemente así, sin pensar. Nos dan — tomamos. Pero entre "dar" y "dar" hay una diferencia significativa.

Puedo que tienes que dar, pero hasta que tú no aceptas, mi acción quedará perfecto: yo le doy — tú no tomas.

Pero si yo te doy, y lo aceptas mi acción se convierte en toda una experiencia: me dio has tomado.

No te puedo dar algo, hasta que ese "algo" no recibirás!

 



¿Por qué en el bien responden mal — racional de la parábola

No te endechas sobre el destino de la...

 

Yo puedo dar, pero "dar" es una acción que depende de ambos estábamos en la misma medida.

Si alguien ofende a ti, tú tienes la elección: tomar sus insultos (a menudo lo hacemos sin pensar) y ofenderse, o simplemente no hacerlo, a sabiendas de que no tienes que.

Es por eso que he dicho que el hombre no podía ti insultar — no te ultrajado, pero tú "ayudó" a él ofender a sí mismo, tomando las palabras ofensivas! publicado

 



Fuente: pritchi.ru/id_2873