Había un hombre en el mundo. Tenía riqueza, fama y una posición alta en la sociedad, pero no había felicidad. No tuvo suerte en el amor, y además, tuvo que luchar con las dolencias todo el tiempo. Un día un hombre decidió pedir consejo de la psicóloga más famosa y respetada del país.
Llegando a la recepción, como en espíritu el hombre habló de su problema y comenzó a esperar consejo. Al principio, el psicólogo miró silenciosamente al nuevo cliente y pensó en sus palabras. Y entonces él respondió que resolver el problema de las enfermedades constantes, atraer el amor a la vida y volverse feliz es posible sólo si él consigue primero aprender a amarse.
Cuando el cliente le preguntó cómo hacer esto, el psicólogo dio las siguientes instrucciones:
Cómo aprender a amarse “La enfermedad no aparece por nada”. Cada persona se le da para pensar en su vida y encontrar un problema psicológico que necesita ser resuelto. El amor propio es una de las causas más comunes.
Muchas personas confunden el amor propio con la autoadmiración. Pero el amor no es lo mismo que la admiración ciega. El primer paso es reconocer sus deficiencias. Este paso es muy difícil, pero también muy importante en el camino hacia la felicidad.
El segundo paso es mucho más complicado que el anterior. Se trata de aceptar tus deficiencias. Cualquier persona que busca armonía interior debe aprender a humillar su orgullo y estar cómodo con el hecho de que no es perfecto. Además, también debe perdonarse por ello. Y perdonar sinceramente, sin sombra de astucia.
Entonces tenemos que seguir adelante a tareas más agradables. Después de aceptar las deficiencias, es imperativo encontrar sus ventajas clave. Y luego alabarte con todo tu corazón por tenerlos.
Vale la pena señalar que los rituales de perdón y alabanza deben repetirse no una vez, sino diariamente. Al menos no hasta que haya una clara sensación de amor propio dentro.
Y después de que el amor por ti mismo se formará y el amor por el mundo circundante, al que ciertamente va a recitar contigo!
¿Puedes perdonar tus imperfecciones y recompensarte con alabanza?