56
Biólogos contra la hipótesis de Darwin
La hipótesis más famosa de Charles Darwin explica el hecho de que si las especies están estrechamente relacionadas, compiten entre sí por alimentos y recursos, porque estas especies ocupan el mismo nivel ecológico.
La mayoría de los científicos tomaron este fenómeno por sentado, dándole gran importancia. Sin embargo, tres experimentadores estadounidenses descubrieron que la teoría de Darwin no se aplica al desarrollo de algas verdes de agua dulce. Este incidente sorprendió a los experimentadores.
El profesor de la Universidad de Michigan B. Cardinale dice que tal descubrimiento fue completamente inesperado para ellos. Cuando obtuvieron los resultados, sus primeros pensamientos fueron cómo esto era posible. Los científicos han llegado mucho tiempo a sus sentidos, porque la hipótesis de Darwin siempre ha sido considerada verdadera. ¿Es posible que la hipótesis sólo funcione en algunos casos?
Los biólogos ya han logrado descifrar más de sesenta genomas de las especies más comunes de algas que se encuentran en América del Norte.
Con la ayuda de esta información, los científicos fueron capaces de estudiar y determinar con precisión el parentesco evolutivo, para distinguir las especies más antiguas, genéticamente únicas y relativamente recientes.
Los biólogos están involucrados en otros desarrollos, ofreciendo a las personas medicamentos que pueden mejorar la salud a cualquier edad. Lectura sobre exámenes laminicos de médicos y pacientes que han curado su cuerpo de muchas enfermedades, se hace evidente que los científicos han logrado alcanzar alturas sin precedentes.
Los científicos estadounidenses en el curso de experimentos obligaron a las algas más estrechamente relacionadas a competir entre sí por recursos, por ejemplo, para el nitrógeno, la luz y el fósforo.
Se realizaron pruebas similares en algas que han divergido durante mucho tiempo en su desarrollo evolutivo. Según la hipótesis de Darwin, las especies de algas estrechamente relacionadas deberían haber competido mucho más fuertemente que parientes lejanos.
Sin embargo, los experimentos realizados directamente en laboratorios y observaciones de algas en lagos y estanques no confirmaron las afirmaciones de Darwin.
Toda la teoría de Darwin se basa en la competencia constante entre las especies y la supervivencia de lo más adecuado que son más adaptados a la vida. Sin embargo, los biólogos han encontrado un hecho interesante que literalmente un tercio de las especies de algas se desarrollan mejor en presencia de especies competidoras. Por lo tanto, añadir otras especies acelera enormemente el desarrollo de plantas, pero no la ralentiza.
Podemos decir que las algas son más propensas a la minería conjunta que a la competencia por los recursos necesarios. Así, toda la hipótesis Darwiniana, que testifica el desarrollo de la naturaleza y la lucha constante entre especies contra las algas, resultó ser errónea.
Fuente: zeleneet.com
Photo report with a note of nostalgia - Moscow 70th
La empresa Affirmed Housing Group demuestra que la energía solar y la vivienda asequible son compatibles