Una historia sobre el vano de la vanidad





El erizo. Una historia sobre el vano de la vanidad

El papa tenía cuarenta años, Славику — diez, el erizo — y menos. Slavik traído un erizo en la cabecera, corrió al sofá en el que estaba el papa con divulgada por el periódico, y, sin aliento, de la felicidad, gritó: — Papá, mira! El papa suspendió el periódico examinado el erizo. El erizo se курносый y bien. Además, el papa alentó el amor del hijo a los animales. Además, el papa mismo gustaban los animales.

— Bueno erizo! — dijo el papá. — La persona simptica! Donde la ha sacado? — A mí el chico en el patio de la dio, dijo slavik.

— Regalado, entonces? — dijo papá.

— No, hemos intercambiado, dijo slavik. — Él me dio un erizo, y yo le билетик.

— ¿Qué otro билетик?

— Lotería — dijo slavik y lanzó un erizo en el suelo.

— Papá, él tiene que dar leche...

— Espera con leche! — estrictamente dijo el papa. — ¿De dónde sacó el billete de lotería? — No me lo compré, dijo slavik. — A quien? — El дяденьки en la calle... muchas de esas entradas vendía. De treinta centavos... Oh, papá, el erizo se metió la mano debajo del sofá... — Espera de tu ежиком! — nervioso, dijo el papa, y lo puso Славика a su lado. — ¿Cómo has dado un muchacho de su billete de lotería?..

Y de repente, este vale algo ganó? — Ganó — dijo slavik, no dejaba de observar ежиком. — Es decir, como es la ganó? — preguntó en voz baja, el papa, y su nariz se cubrió de gotas de sudor. — Que ganó? — La nevera! — dijo slavik y sonrió. — ¿Qué es?! — Papá extrañamente de temblar. — Una nevera?!.. Que eres coño la hablas?.. Cómo lo sabes?!

— ¿De dónde? — se ha ofendido slavik. — Lo he comprobado en el periódico... Allí los tres primeros циферки coincidieron... y otro... Y la serie de la misma!.. Yo ya puedo comprobar, papá! Soy un adulto!

— El adulto?! — Papá ya зашипел que el erizo, que ha salido de debajo del sofá, de miedo acurruqué en la maraña de. — El adulto?!.. Cambias el refrigerador en un erizo?

— Pero yo pensé, — de la cabeza) dijo slavik, — pensé que la nevera ya tenemos, y el erizo — no... — ¡Cállate! — gritó el papá y la levantó de un salto del sofá. — ¿Quién?! ¿Quién es este chico?! Donde está?

— Está en mi casa vive, dijo slavik y lloró. — Su Senya llamo...

— Vamos! — gritó de nuevo el papa y agarró un erizo con sus manos desnudas. — Vamos rápido!!!

— No iré, — sollozando, dijo slavik. — No quiero frigorífico, quiero un erizo!

— Sí iremos mismo, оболтус, — ha comenzado a enronquecer el papa. — Sólo se podrá devolver el billete, yo te doy el cien ежиков la compra...

— No... — gritó slavik. — No se puede comprar... Сенька y como no quería cambiar, yo apenas hablaba...

— También, se ve, el pensador! — es zaheridor dijo el papa. — Bueno, rápido!..

El sena es de ocho años. Estaba de pie en medio del patio y con temor miraba terrible papá, que en una mano llevaba Славика, y en la otra el de un erizo.

— ¿Dónde? — le preguntó su padre, aproximando a la Сеню. — Donde el billete? Un delincuente, toma tu púa y da el billete!

— No tengo el billete! — dijo Senya y tembló.

— Y donde está? — gritó papá. — Que estás con él hizo, el prestamista? Vendió?

— Yo soy de él paloma hecho — susurró Senya y he comenzado a gimotear.

— No llores! — dijo, tratando de estar tranquilo. — No llores, niño... Significa, que has hecho de él una paloma. Y donde el azul?.. ¿En dónde está?..

— Está en la cornisa habitó... — dijo Senya.

— ¿A qué cornisa?

— Won en el! — y Senya mostró en la cornisa del segundo piso.

Papá se quitó el abrigo y se metió la mano en el tubo de drenaje. Los niños de abajo con entusiasmo observado por él. Dos veces papá se desprendía, pero finalmente дополз hasta la cornisa y se quitó el pequeño желтенького papel de la paloma, que ya ligeramente размок de agua. Al bajar a la tierra y jadeando, el papa ha desenvuelto билетик y vio que había lanzado hace dos años.

— Y tú, una vez comprado? — preguntó el papá de el Славика.

— Otra de segundo grado, dijo slavik.

— Y cuando la prueba? ¿ — El día de ayer.

No es un sorteo... — le dijo el papá.

— Bueno, ¿y qué? — dijo slavik. — Pero de todos циферки convergen...

Papá se fue silenciosamente afuera y se sentó en un banco. El corazón de los frenéticos latía en el pecho, delante de los ojos nadaban círculos naranjas... fue duro bajó la cabeza.

— Papá, — dijo suavemente slavik, acercando a su padre. — Tú no te preocupes! Сенька dice que de todos modos nos da un erizo...

— Gracias! — dijo el papá. — Gracias, Senya...

Él se levantó y fue a la casa. Él de repente se puso muy triste. Se dio cuenta de que nunca no devolver ese feliz de tiempo, cuando con el corazón ligero, cambian la nevera al erizo. publicado

Autor: Gregorio Gorin

P. S. Y recuerde, sólo cambiando su consumo — estamos juntos cambiando el mundo! ©

Fuente: ok.ru/iq.zhurnal/topic/63865001945926