567
Carreras de caballos
Pasé mi infancia en un pueblo a los abuelos. Una vez que mi abuelo me llevó a un período de cuatro años, a caballo. Me gustó tanto que quería ser dueño de todos los medios para montar. En cualquiera. Pronto todas las criaturas que viven en la granja del abuelo rehuido de mí en el miedo. Watchdog me volví el trineo. Ovejas y cordero, tímidamente tropiezo en un montón, me pasan porque he intentado varias veces para dar un paseo en la oveja - no tuvo éxito. El toro polutoragodovalogo Mikhailovich seguí mirando desde lejos, ardiendo con el deseo de viajar, pero él parece entender mis intenciones al acercarse a bajar la cabeza, y me mostró sus cuernos, no grandes, pero para mí impresionante.
Un día me paseaba por el patio, sacó de su bolsillo y construyó malvados planes de toffee, como montar algunos skotinku ... De repente alguien me empujó por detrás. Me di la vuelta - hocico de cerdo Borka en su palma me empuja. Esto, que le enseñó a Toffee, bastante pequeño cuando se pone en la casa. Estoy de acuerdo con él, en vez de muñecas jugado: bañarlo, le Swaddled de los pezones de alimentación, tratamiento de toffee, cantando canciones de cuna, metidos en la cama a dormir - hasta que la abuela cultiva-Borka en sarayku no traducidas. Durante este tiempo, Boris ha crecido, pero recordó mi caramelo. Me quedé mirando el tamaño de Borka. Le Dimensiones Estoy totalmente de un montaje. Crecimiento Borka fue ligeramente por encima del cuello de mi vestido. Y entonces me di cuenta, a los que me paseo. Es hora de devolver el favor Borka ha llegado para mi cargo de él.
Saqué un caramelo, desplegué y mostré lechón. Cualquier sospecha de un truco, se me acercó, le cogió las manos y comenzó su masticar toffe. Toffee funde en la boca y se pegó a los dientes. En general, Boris, tratando de deshacerse de caramelo pegado, olvidado durante un tiempo por mí. Y a mí que un momento fue suficiente para despegar con un chillido en su espalda. Una vez en Borkinoy volver, estoy en una fracción de segundo me di cuenta de que es necesario para que algo espera, porque Boris, mi grito asustado, y más aún chtoya saltó sobre su espalda, gritó como un jet y se echó a correr. Apenas tuve tiempo de agarrar sus orejas.
En este momento mi abuelo llevó a casa a las cabras y ovejas en el riego del mediodía. Él acababa de abrir la puerta, me monta una Borka salvaje chilló de chillido salvaje barrida por delante de su abuelo. Abuela saltó de la casa, asustado por el ruido, mi abuelo, casi me golpeó en la perplejidad de pie en la puerta y vi como me jubile montar en un cerdo de espíritu en algún lugar sobre la colina. Era evidente que el aleteo de un viento en contra de mis arcos en coletas por lo que el dobladillo de su vestido. Pronto la mitad de la calle se deslizó de sus hogares, aprender lo que el alboroto era esto. Y vemos: el polvo remolinos, y una nube de polvo con los chillidos salvajes corriendo a través de la muchacha de la aldea a chillar como una sirena de cerdo
.
No sé exactamente cuánto tiempo duró, este salto, pero la adrenalina y la emoción me bajé. Cerdo cansado y corrió hacia la casa. Allí su abuelo y capturado. Por supuesto, yo estaba castigado por una broma. Pero la experiencia de la carrera fue la pena.
Un día me paseaba por el patio, sacó de su bolsillo y construyó malvados planes de toffee, como montar algunos skotinku ... De repente alguien me empujó por detrás. Me di la vuelta - hocico de cerdo Borka en su palma me empuja. Esto, que le enseñó a Toffee, bastante pequeño cuando se pone en la casa. Estoy de acuerdo con él, en vez de muñecas jugado: bañarlo, le Swaddled de los pezones de alimentación, tratamiento de toffee, cantando canciones de cuna, metidos en la cama a dormir - hasta que la abuela cultiva-Borka en sarayku no traducidas. Durante este tiempo, Boris ha crecido, pero recordó mi caramelo. Me quedé mirando el tamaño de Borka. Le Dimensiones Estoy totalmente de un montaje. Crecimiento Borka fue ligeramente por encima del cuello de mi vestido. Y entonces me di cuenta, a los que me paseo. Es hora de devolver el favor Borka ha llegado para mi cargo de él.
Saqué un caramelo, desplegué y mostré lechón. Cualquier sospecha de un truco, se me acercó, le cogió las manos y comenzó su masticar toffe. Toffee funde en la boca y se pegó a los dientes. En general, Boris, tratando de deshacerse de caramelo pegado, olvidado durante un tiempo por mí. Y a mí que un momento fue suficiente para despegar con un chillido en su espalda. Una vez en Borkinoy volver, estoy en una fracción de segundo me di cuenta de que es necesario para que algo espera, porque Boris, mi grito asustado, y más aún chtoya saltó sobre su espalda, gritó como un jet y se echó a correr. Apenas tuve tiempo de agarrar sus orejas.
En este momento mi abuelo llevó a casa a las cabras y ovejas en el riego del mediodía. Él acababa de abrir la puerta, me monta una Borka salvaje chilló de chillido salvaje barrida por delante de su abuelo. Abuela saltó de la casa, asustado por el ruido, mi abuelo, casi me golpeó en la perplejidad de pie en la puerta y vi como me jubile montar en un cerdo de espíritu en algún lugar sobre la colina. Era evidente que el aleteo de un viento en contra de mis arcos en coletas por lo que el dobladillo de su vestido. Pronto la mitad de la calle se deslizó de sus hogares, aprender lo que el alboroto era esto. Y vemos: el polvo remolinos, y una nube de polvo con los chillidos salvajes corriendo a través de la muchacha de la aldea a chillar como una sirena de cerdo
.
No sé exactamente cuánto tiempo duró, este salto, pero la adrenalina y la emoción me bajé. Cerdo cansado y corrió hacia la casa. Allí su abuelo y capturado. Por supuesto, yo estaba castigado por una broma. Pero la experiencia de la carrera fue la pena.