Expertos: la infraestructura energética del planeta es vulnerable al cambio climático

Plantas de energía en riesgo

Las compañías energéticas tienen gran parte de la culpa por el calentamiento del planeta, produciendo alrededor del 40% de las emisiones globales. Sin embargo, un nuevo estudio muestra que los propios negocios también se verán afectados por el cambio climático.

Plantas de energía en riesgo



A medida que las inundaciones, las sequías y las condiciones meteorológicas extremas se vuelven más comunes, muchas plantas de energía podrían volverse vulnerables a esos fenómenos, lo que podría poner en peligro los suministros energéticos en todo el mundo.

Los casos con centrales nucleares como Fukushima ya han demostrado que las centrales nucleares son más vulnerables a los desastres naturales de lo que todos esperaban. Cuando la situación de sequía empeora, muchas centrales eléctricas enfrentarán el hecho de que simplemente no tienen suficiente agua para enfriar sus reactores nucleares. Otras centrales eléctricas, incluidas centrales eléctricas de carbón, son vulnerables a inundaciones que podrían perturbar redes enteras de distribución de energía. Sin una planificación cuidadosa, muchas áreas podrían terminar sin energía ya que el cambio climático abrupto comienza a tener un impacto creciente.



Plantas de energía en riesgo

En el informe, que se finalizó para el Consejo Mundial de la Energía, se pide a las empresas energéticas que vuelvan a examinar sus sistemas a fin de planificar el futuro. Por ejemplo, el suministro de agua duplicada y el exceso de tensión en las redes eléctricas podrían aportar nuevas mejoras en la protección de la infraestructura. Las empresas también podrían beneficiarse ampliando fuentes de energía limpia como el viento y el solar, y construyendo sistemas de energía más inteligentes que distribuyen y suministran electricidad de manera más eficiente.



Plantas de energía en riesgo



No es de extrañar que las empresas energéticas no piensen mucho en cambiar las cosas. Los combustibles fósiles todavía dominan el mercado, pero vale la pena considerar que las empresas tendrán que gastar cientos de miles de millones de dólares sólo para mantener el sistema existente funcionando. ¿Por qué no tomar parte de ese dinero y ponerlo en direcciones más verdes y sostenibles, en lugar de continuar trabajando en un sistema arcaico que sólo continúa aumentando el cambio climático que amenaza la infraestructura energética desde el principio?

Fuente: www.ecobyt.ru/