En las zonas húmedas de la selva de América del Sur hace unos 58 millones años vivió una
boa gigante
La longitud de este enorme reptil estaba a unos 14 metros y pesaba más de una tonelada de la misma. Según los científicos, la boa con bastante facilidad podía tragar todo un cocodrilo.
Hasta hace poco, los investigadores no estaban al tanto de la existencia de este reptil fósil, cuyo descubrimiento permitirá a los científicos a aprender más sobre el pasado y es probable que mirar hacia el futuro, según la BBC.
El hallazgo fue hecho durante las excavaciones en una mina de carbón en Kerrehon (Colombia). BoA fue nombrado Titanoboa cerrejonensis (enorme boa Kerrehona), y, según los expertos, se trata de una relación de anacondas y boa moderna. La serpiente no era venenosa - que mató a sus presas por medio de una enorme resistencia a la compresión (más de 180 libras en 6, 4 cm sq.). Tenga en cuenta que esta carga era un hombre, si cayó bajo el peso de un medio del puente de Brooklyn.
Los científicos creen que después de la extinción de todos los dinosaurios en el planeta, boa Titanoboa fue el depredador más grande en la Tierra durante 10 millones de años. El tamaño de la serpiente, según los investigadores, se puede explicar por el hecho de que en el ecuador era mucho más caliente de lo que es ahora. Los investigadores también observaron que durante el período de los niveles de dióxido de carbono selva kerrehonskih en la atmósfera era más alto que el actual en un 50 por ciento.
Con el fin de entender cómo prehistórico boa corresponde con la fauna moderna, y explorar su dieta alimentaria y tener una idea de su aspecto, los investigadores decidieron estudiar los restos del cráneo de este reptil.
Actualmente, se encuentran los restos de tres calaveras, lo que permitió a los investigadores reconstruir completamente la estructura del cráneo de los enormes reptiles. Actualmente en el Museo Smithsonian de Historia Natural en los EE.UU. exhibió una serpiente falsa en tamaño completo, y el próximo año va a ir de gira por América.
Se espera que un nuevo estudio permitirá a los científicos aprender cómo el mundo animal antiguo, y para obtener nuevos datos sobre la historia del clima de la Tierra. Por lo tanto, los fósiles pueden decirnos sobre las consecuencias del cambio climático actual.
Además, los científicos no descartan que si el mundo de nuevo a elevar la temperatura, la boa gigante puede regresar a nuestro planeta, pero tomará un millón de años.