Rhinos en Zimbabwe son rescatados por un ex oficial de fuerzas especiales.

En gran parte de África, las tácticas de lucha contra la pobreza han permanecido prácticamente sin cambios durante décadas. Cada día se envían pequeños grupos de guardabosques entrenados y mal equipados para realizar patrullas en lugares remotos y peligrosos. Los cazadores modernos han evolucionado a lo largo de este tiempo, y han utilizado tácticas militares y equipos para matar animales grandes como elefantes, rinocerontes y gorilas. Además, en el fuego cruzado a manos de bandidos sufren los rangers, también hay muertes. En vista de esta deficiencia, la International Anti-Poaching Foundation (IAPF) estableció en 2009 para llenar la brecha.





En las fotos, que se publican justo abajo, hay un ex soldado australiano que decidió proclamar una lucha contra el exterminio ilegal de rinocerontes. Su nombre es Damian Mander, que utiliza tácticas militares modernas para salvar a los rinocerontes de cazadores furtivos en Zimbabwe.





Especies como elefante y rinocerontes están al borde de la extinción. Y estos animales son muy difíciles de proteger, porque los cazadores recurren a los medios más extremos para destruirlos. Si se hace posible preservar estos animales, se protegerán ecosistemas enteros.

Damian Mandra fue a África y se entristeció por la situación con los animales. La situación lo llevó a su núcleo, y a su regreso a Australia, vendió su casa y el dinero que ganó de la venta de su casa, solía llevar a cabo una operación especial para proteger a los rinocerontes - usó su experiencia militar para entrenar al ejército, que se suponía que luchaba contra los cazadores furtivos en Zimbabwe.





Los partidarios de Mandra han utilizado vehículos aéreos no tripulados, también llamados drones, para proteger a los habitantes de la vida silvestre. Sus drones tienen la función de la visión térmica y nocturna de aviones no tripulados, estas tecnologías se utilizan en operaciones militares, en su caso, para combatir la caza furtiva, la tecnología evita el asesinato de animales por cazadores furtivos.



Fuente: eco-portal.kz