Cuando Paul Barton de la organización sin fines de lucro Elephantstay en Tailandia decidió jugar para el obispo Pedro el piano, él incluso no podía pensar que va a pasar ...
Hay que reconocer que Pedro no es ciertamente el futuro Beethoven, pero bailando y tocando el piano, obviamente, le traen alegría.
Comparte este vídeo a un amigo acerca de este elefante divertido.
www.youtube.com/watch?v=hjsu3SGAdLs