Cada año, desde tiempos inmemoriales en la región española de Galicia realizó fiesta Rapa das bestas. En el corral están impulsando una manada de caballos salvajes, y luego se echó a los hombres y mujeres españoles frenéticos. Ellos deben aprovechar la cavallino rampante, tirándolo al suelo y, literalmente, con sus propias manos para sacar su cola y crin, y luego poner la marca.